¿Artista que quiere exponer en importantes galerías y museos? El juego didáctico Reaching de MoMA le muestra el camino a seguir.
¿Crítico de arte o curador con escasas referencias paraescribir sobre un artista? Conceptual Wheel es su solución.
¿Galerista preocupado por sus artistas? Regáleles suplementos para la imaginación, la inspiración y la profundidad.
Conceptual Shop llega al Lobby del MADC con cinco líneas de producto: papelería, libros, juegos didácticos, tecnología y suplementos vitamínicos; en conjunto un irreverente inventario que ofrece desde una Guía Conceptual de Frenología (para curadores), pasando por un tratado sobre las relaciones sadomasoquistas entre los protagonistas del mundo artístico (con látigo de cuero incluido) hasta una Güija para pedirle consejo a los espíritus de los más grandes artistas, críticos y curadores de todos los tiempos.
Conceptual Shop es una parodia extrema respecto al poder de la sociedad de consumo para transformar el arte y el pensamiento en pura mercancía, lo que de paso supone la mutación de curadores, críticos de arte, galeristas y artistas en la clientela autocomplaciente de un sistema del arte que no se nutre de ideas, ni de procesos creativos, ni de trabajo, sino que depende enteramente de la lógica del mercado y de la adopción de convenciones sociales, publicitarias y de mercadotecnia para garantizar su perpetuidad y la de sus acólitos.
Afortunadamente el artífice de esta tienda falsa, el artista Max Cantillo, se abstiene de asumir la posición del creador incomprendido o del inquisidor que clama por expurgar los pecados del sistema del arte contemporáneo.
Conceptual Shop es el arte que se burla del arte y el artista que se ríe de sí mismo para despojarse de conceptos míticos sobre el genio creador. Porque al fin y al cabo hay dos hechos que aunque no son ficción igual se asumen con buen humor: Max Cantillo está exponiendo en el MADC y su obra es una mercancía ella misma.
Adriana Collado-Chaves. Curadora.